Lograr un puesto alto en tu empresa te podría poner en riesgo de no estar bien ubicado (con los pies en la tierra) cuando te retires: ¿Seguirás deseando ser el «Ingeniero», el «Licenciado», el «Jefe», el «Gerente» o el «Directivo» y decepcionado de no serlo más?
Si ese fuera tu caso, tienes que trabajar mucho, interiormente, para darte cuenta que esos títulos no te definen; es decir, no eres lo que eres gracias al título o al puesto, más bien tienes ese título o ese puesto gracias a lo que en realidad eres.
Cuando te jubiles, puedes aprovechar todo ese talento y experiencia en tu propio beneficio y el de tu familia. Te darás cuenta de que no hay nada más satisfactorio y pleno que lograr resultados para tí y tu familia.
Si tienes la energía, la experiencia, la sabiduría, el talento y la claridad de lo que quieres lograr después de haberte jubilado, el titulo te quedará corto.